El ajuste 'K'
¿Por qué en 2020 está prohibida la palabra "Ajuste"?
Paritarias suspendidas en muchos rubros. Inflación récord. Devaluación encubierta. Jubilaciones ajustadas por decreto. Cancelación de los pagos del ATP e IFE. A partir de Enero, suba de las tarifas de Luz y Gas. Aumento del combustible. Recorte del presupuesto 2020 para los Ministerios de Salud ($2.905 Millones de pesos), de Desarrollo Social ($4.814 Millones de pesos), de Desarrollo Territorial y Hábitat, al mando de del ex Intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, ($3.408 Millones de pesos). Todas estas son medidas de ajuste, tomadas por el Gobierno Nacional ¿y Popular?...
Durante el 2020, la pérdida de poder adquisitivo de los argentinos llegó a niveles históricos. Según el último registro del INDEC, la canasta básica aumentó en el mes de Octubre, un 5.7% y que una familia tipo, necesita casi $50000 para superar la línea de la pobreza. Aún no están publicados los datos del mes de Noviembre, pero teniendo en cuenta la aceleración de los precios, no se esperan mejores datos.
En medio de esta situación, que apremia a los que menos tienen, la Cámara de Diputados aprobó la aplicación del "Impuesto a las grandes fortunas". Es un aporte que se hará ¿por única vez?, y tendrán que pagarlo las personas físicas que tengan declarados bienes por 200 millones de pesos. Se trata aproximadamente, 9300 contribuyentes. Esta medida "maquilla" la realidad actual, carga de una falsa épica de "Robin Hood" al Gobierno de Alberto Fernández. Pero la realidad, siempre termina matando al relato. Sigue sin quedar claro cuáles son los beneficios a largo plazo de esta medida, ni cómo mejorará la vida de los argentinos. Si bien la medida en principio estaría destinada a la compra de insumos, un pequeño porcentaje a la exploración y desarrollo de gas, la mayor parte está destinada a becas, barrios populares y pymes, sabemos que la aplicación muchas veces tiene fines más políticos que verdaderamente sociales.

Hay algo que sí es seguro, y es que la palabra "ajuste" no es bien vista por el Gobierno ni sus dirigentes, palabra que hasta el año pasado militaban hasta el cansancio (y con apoyo de los medios).
Yendo a la particularidad de nuestro Municipio de Avellaneda, y teniendo en cuenta el componente social y demográfico del mismo, en la Juventud Radical vemos con gran preocupación que el ajuste va afectar en gran medida a nuestros conciudadanos: jubilados, trabajadores y jóvenes, principalmente.
Es por eso que desde la Juventud Radical Avellaneda, llamamos a la conciencia y a la acción. Involucrarse es la mejor manera de cambiar la realidad.
Autora: Denise Demkow